Resumen:
El inicio del siglo XXI y las transformaciones de las cuales hemos sido testigos, promotores o protagonistas, muestran la imperiosa necesidad de plantear novedosos modelos y posturas políticas, como económicas, que permitan mejorar la calidad de vida de la sociedad. El Estado moderno constituye la principal institución de la sociedad y fundamenta su existencia en garantizar y conservar la vida humana, regulado por normas y leyes, que permiten mantener el orden, la convivencia y el progreso social.
La complejidad del mundo actual, inserta a los Estados en una nueva dinámica, donde la relación entre sus instituciones y la sociedad se observa distinta. La pérdida de relativa autonomía política y económica de los países, exige nuevas formas de organización social, más abiertas y plurales. En este contexto la discusión sobre la conveniencia del Estado Nacional en tomo a la globalización, ha adquirido gran importancia y se ha orientado hacia la Reforma del Estado, la redefinición de los deberes y fines de la acción gubernamental, así como de la administración pública.