Resumen:
En el ámbito argumentativo, conceptual y sugerente de la ciencia administrativa, los enfoques, conceptos y planteamientos, transitan en la actualidad, por una reformulación amplia que responde al nuevo contenido de las ciencias sociales, las cuales han ingresado en los últimos tiempos, al estudio y análisis de las condiciones
de vida que caracterizan la relación intensa de la sociedad y el Estado; el gobierno y los ciudadanos; la gestión pública y las organizaciones activas de la sociedad civil.
La revisión de los paradigmas es la constante más peculiar que impacta en las comunidades académicas y profesionales, porque indica el momento en que las
teorías están sometidas a la prueba de los hechos, y a la corroboración o no de sus postulados. El nexo de las categorías y los sistemas factuales, el vínculo entre los objetos e conocimiento y los métodos de investigación, así como la correspondencia de las hipótesis con los argumentos, exigen cada vez más un trabajo no sólo continuo, sino encaminado a descubrir los elementos empíricos y las tendencias que sigue la realidad entendida como un conjunto de problemas. En este caso, la Nueva Gestión Pública es una postura analítica y metodológica que tiene su origen en los países anglosajones, y que influye en distintas latitudes geográficas para que sea adoptada simultáneamente
como campo de estudio y práctica gubernamental. Se trata de un movimiento vasto que tiene patrocinadores en la academia, la vida profesional y la vida política, ya que confían en que es una alternativa viable para transformar a fondo la organización y el funcionamiento de la administración pública burocrática, a la cual se cuestiona por ser el origen de los contratiempos operativos que tiene el Estado en la era de la globalidad.