Resumen:
El mundo actual es la combinación de situaciones caóticas que reflejan cómo los contecimientos y hechos se enlazan hasta configurar condiciones de vida que oscilan entre las crisis, las tensiones y los cambios.
Las crisis como fenómenos estructurales, demuestran que ciertas formas de vida llegan a su agotamiento, con lo cual los sistemas sociales, políticos y económicos ingresan a fases de renovación y desafío que se han de gobernar con eficacia. Las tensiones derivan de situaciones que son producto de las contradicciones dadas en la sociedad y las economías públicas, se desenvuelven cada vez más, en condiciones de mayores desajustes que dañan la vida privada, pública, social y política. Esto ocasiona contradicciones entre la acumulación de la riqueza material y las formas en que se distribuyen beneficios sociales que, ante la restricción de recursos, se han convertido en bienes escasos.
Los cambios apuntan por la senda que refleja cómo emergen nuevas energías, actores y sistemas que dan vida a los procesos que conllevan a que la sociedad y Estado establezcan sistemas de cooperación que involucran a la esfera privada y pública, al enlazar respuestas institucionales ante la demanda creciente de los problemas públicos.