Resumen:
La crisis económica y social en la que se encuentra inmerso el Ecuador, como producto de desajustes internos y externos, nos invita a reflexionar sobre la necesidad de adoptar nuevas medidas, que orienten a sus instituciones a la consecución del bien común. En esta hora en que el mundo avanza en su desarrollo, a pasos acelerados, las instituciones deben buscar su espacio y presencia. Es por eso que los gobiernos municipales del Ecuador están empeñados en involucrarse de manera más directa para recuperar su posición de líder del desarrollo local; para ello necesitan fortalecer e incursionar en proyectos encaminados, primeramente, al cambio de mentalidad y actitud de sus miembros, para que el positivismo de sus mentes irradie en la confianza y colaboración de la colectividad. Es necesario, por tanto, emprender en programas de verdadera reforma administrativa y financiera, de los gobiernos municipales, renovarse hacia una gestión moderna, con delimitación clara de sus deberes, derechos y responsabilidades; redefinir patrones de conducta, el rol de cada uno en su área de actividad; contar con un sistema técnico de administración, elemento básico y fundamental para la optimización de los recursos humanos, financieros, materiales; propendiendo siempre a constituirse en el motor para el cumplimiento de los objetivos locales y nacionales, y sean verdadero agentes de transformación para la consolidación de la paz social y de la nación.