Resumen:
El profundo desequilibrio del sector externo de la economía nacional, reflejado en la incapacidad del país para cumplir con las obligaciones de pago derivadas del servicio de la deuda externa y cubrir al mismo tiempo los requerimientos de divisas para adquirir los bines de consumo y los insumos agrícolas e industriales, obliga a la adopción de estrategias que permitan corregir la vulnerabilidad del comercio exterior ecuatoriano, a través de políticas orientadas, por una parte, a estimular las exportaciones tradicionales y no tradicionales y, por otra, a sustituir una parte de las importaciones de bienes terminados, intermedios y materias primas que pueden ser producidos internamente. Si bien los principales productos de exportación del país están sujetos a una fuerte competencia internacional, como resultado de la sobreproducción mundial de materias primas, es evidente que el sector petrolero seguirá constituyendo en la próxima década el soporte fundamental de comercio exterior ecuatoriano, una vez que se inicie la producción en aquellas áreas que fueron adjudicadas en estos últimos años a diversas empresas extranjeras, bajo la modalidad de prestación de servicios.