Resumen:
La naturaleza revela sus maravillas y bellezas que nos llevan a meditar como una fuente de vida sabiduría y gozo para la humanidad. El sol y la lluvia que alegran y refrescan la tierra, los montes, los mares y los valles, todo nos habla de lo hermoso de un paraíso. Los bellos pajares con sus preciosos cantos llenan el aire de melodías, los flores exquisitamente matizadas perfuman el ambiente, los elevados arboles del bosque con su rico follaje de viviente verdor nos invitan a ser felices y a encontrar mensajes de esperanzas y consuelo. Hay flores en los cardos y las espinas están cubiertas de rosas y esto nos hace meditar en el cuidado y amor que debemos dar a esta hermosa naturaleza. Los azules lagos y lagunas, los riachuelos, los arroyos, los bullicios ríos y las tranquilas fuentes y los mares y los océanos que guardan la vida de hermosas criaturas, cobijados bajo un cielo azul, límpido, fresco y radiante, esto es lo claro y puro de nuestro verdadero mundo. ¿Y por qué no cuidar? ¿Y por qué no comprometernos a mantener?